24 enero, 2013
Avance. La telefonía IP (protocolo de Internet) ingresa lentamente en el mercado residencial con precios más convenientes y tecnologías más confiables. Ya existen localidades con prestaciones 100 por ciento IP.
15/01/2013 00:01 | Eduardo Aguirre (Especial)
Si bien está presente desde hace varios años en el mercado y pese al aumento sustancial en la penetración de la banda ancha hogareña (unos 5,2 millones de hogares conectados en el país, según el Indec), la telefonía IP residencial no ha dado aún el gran salto en cantidad de usuarios y hoy es una opción contemplada fundamentalmente por quienes no cuentan con servicio de telefonía tradicional.
La diferencia fundamental entre ambos sistemas es que la telefonía IP utiliza la conexión de banda ancha como medio de transporte de la comunicación. Además de los costos, suma ventajas relacionadas con la disponibilidad, ya que una línea telefónica IP puede ser utilizada tanto desde un teléfono tradicional como desde una PC, notebook, tablet o smartphone conectados a Internet. Su mayor desventaja está relacionada directamente con la robustez del servicio, ya que por ejemplo un corte de energía afecta también al servicio de telefonía IP, algo que no sucede con el tradicional.
La oferta local.Una de las empresas que en Córdoba ofrece este servicio es Iptel:
“Estamos tratando de llegar a los barrios donde no están las redes tradicionales, los barrios nuevos, y lo estamos haciendo ya sea con redes de fibra o inalámbricas”, dijo a Tendencias. Sobre el servicio en sí, Lapid agregó que “permite contar con una o dos líneas telefónicas sobre la conexión de Internet y hacer llamadas desde la PC, notebook o cualquier otro dispositivo conectado”.
En cuanto a los costos finales para el usuario, Lapid destaca que la telefonía IP resulta más económica que la telefonía tradicional, especialmente en llamadas nacionales e internacionales donde el ahorro puede llegar al 40 o 50 por ciento, mientras que en llamadas locales resulta hasta un 30 por ciento más económico. Explicando los motivos, Lapid agrega que:
“la telefonía tradicional se tarifa por pulso; a cuántos minutos equivale cada pulso facturado depende del horario en el cual se realice la llamada, hora pico o no. En cambio, en telefonía IP, se tarifa directamente por minuto y no tiene bandas horarias diferenciales, no existen horas pico: el precio del minuto es siempre el mismo”.